jueves, 11 de marzo de 2010

NEONATOLOGIA

No todo fue como esperábamos cuando nació Ana. Nos llevamos un buen susto con ella la segunda noche cuando sufrió lo que el pediatra diagnosticó como una crisis cianótica. A eso de la una y algo de la madrugada ya del martes, medio dormida la oigo que empieza a despertarse. Ya la iba a coger para darla de comer cuando la oí regurgitar algo. Como ya la había pasado otra vez no me preocupé y me incorporé en la cama para limpiarla. Ahí ya me llevé uno de los mayores sustos de mi vida, cuando me di cuenta de que no podía respirar y estaba sufriendo convulsiones. Empecé a llamar a David, que dormía en una de las sillas para que avisase inmediatamente a una enfermera. De lo que me di cuenta después es que le estaba llamando en voz más o menos baja, procurando no despertar a mi compañera de habitación, y claro, con ese tono tuve que llamarle dos o tres veces para que me oyese. Aun así le di un buen susto a él también, al despertarle tan de golpe, y al principio le costó reaccionar. Fue al final la suegra de mi compañera, que estaba despierta, la que salió corriendo de la habitación llamando a gritos a la enfermera. Debo reconocer que la atención fue inmediata. Tres enfermeras llegaron volando y cogieron a Ana, que en ese momento empezó a llorar, recuperando el ritmo respiratorio. Se la llevaron al nido, donde en poco tiempo la estaban haciendo un lavado gástrico y despejando sus vías respiratorias. Ya volvía a tener su color normal y respiraba bien, pero las enfermeras llamaron al pediatra de guardia, que subió a los pocos minutos y decidió ingresarla en neonatología (la UCI de los recién nacidos) por precaución. Allí estuvo hasta las siete de la tarde del miércoles y le hicieron un montón de pruebas que normalmente no se les hacen a los bebés al nacer. Como decimos en casa, la hicieron una ITV completa y como todo dio bien, nos hemos quedado tranquilos respecto a su salud.
En neonatología el acceso es bastante restrictivo. Hay unos horarios de visita muy cortos para los padres y aun más para otros parientes (un familiar o un amigo solo puede entrar durante 10 minutos a una hora determinada, acompañado de uno de los padres, una sola visita al día). El único acceso un poco más "libre" es para las madres, cada tres horas a partir de las nueve de la mañana y para darles el pecho únicamente. Allí tienen a todos los prematuros, bebés que nacen muy pronto y necesitan atención constante y cuidados especiales. Ana era la única ingresada ajena a ese motivo, y la que menos tiempo iba a estar de todos ellos. En el momento de ingresar ella, había otros catorce bebés allí y la noche siguiente ingresó otro más. Tienen a bastante personal trabajando (en alguno de los turnos contabilicé siete enfermeras, y dos pediatras) pero lo vi normal, ya que son niños que en cualquier momento pueden sufrir algún fallo en el organismo y no se pueden despistar. Hubo un turno en el que, por la razón que fuera, solo estaban cuatro en una sala y una enfermera sola con los tres que eran "grandes prematuros" en otra sala. No daban abasto (solo dar de comer a algunos de esos chiquitines puede llevar más de media hora, ya que aun no tienen el reflejo de tragar) y tuvieron que pedir a otras secciones que les enviasen refuerzos.
Pude charlar con otras madres, mujeres que llevaban yendo a esa sala semanas para estar con sus hijos y que probablemente aun les quedasen semanas, o incluso meses, antes de poder llevárselos a casa. La paciencia y la resignación de la que hacían gala me hicieron darme cuenta de la suerte que tenía yo. Mi hija estuvo solo un par de días allí y por precaución. Tiene que ser muy duro tener que acudir día a día al Hospital y solo poder estar con tu hijo unas pocas horas al día, tener que sacarte la leche con un extractor en vez de podérsela dar tú misma y tener que marcharte cada noche dejándolo en manos ajenas en vez de tenerlo a tu lado. Y que conste, las enfermeras que trabajan allí son muy cariñosas con los niños,además de eficientes. Pero lo que tú quieres es estar en casa con tu hijo.
El miércoles, como ya me habían dado el alta el día anterior, me lo pasé rondando por el Hospital desde las nueve de la mañana, yendo cada tres horas a darla de comer y cambiarla. El resto del tiempo tuve la "suerte" (llamémosla así) de que un amigo de toda la vida de mis padres estaba ingresado para unas pruebas y que con él estaban su mujer y sus hijas, con las que mi hermano y yo nos hemos prácticamente criado. Así que el resto del tiempo se me fue bastante rápido charlando con ellos en la habitación donde estaba ingresado este amigo o en la cafetería con sus hijas. Ya por la tarde, entre las tres y media que dejé a Ana comida y limpia y la siguiente toma a las seis, aproveché para acercarme al taller de mi padre a recoger una cosa que necesitaba y a hacer algo de compra. Y a eso de las siete ya tenía a mi peque conmigo, vestida y preparada para irnos a casa.
No salió todo igual que con Alicia, pero al menos todo salió bien, que al final es lo que importa.

5 comentarios:

Straja dijo...

Jolín, pues vaya susto. Se me pone la piel de gallina de pensarlo, ufff...

Oye, una cosa, compartíais habitación?? Eso es nuevo, cuando yo estuve eran individuales...

Besotes

Marisa dijo...

Era individual, pero esos días estaban desbordados de partos (me dieron el alta estando Ana ingresada porque les faltaban camas). Me imagino que la luna ejercería su influencia, jejeje.

Straja dijo...

Pues vaya... me da a mí que si ya han empezado a hacerlo así ya no serán individuales...

El otro día tuve que ir a urgencias de ginecología, y como tardó mucho la ginecóloga en venir le dije "¿ tenéis muchos partos?" y me dijo "eso siempre"... Y también más de una vez he oído de gente que le toca en el Clínico pero que van a última instancia al Nuevo por las habitaciones.

Marisa dijo...

No me preocupó, mi compañera era muy maja y así tuvimos con quien charlar. Y si vienen del clínico por las habitaciones individuales al final se pueden llevar un chasco porque se aburririan sin telefono ni television:-)

Straja dijo...

Madre, todavía siguen así!!! Pues para cuando van a poner la tele al menos!!! Ya va a hacer un año que yo estuve allí, y aún están sin televisión!!! Bufff. Claro, que casi prefiero que den prioridad a otras cosas.